girls of summer

Como hace muuucho frío, me pareció buena onda recordar imagenes veraniegas y volver a la playa imaginariamente. El verano rocks babe.
Mañana nos espera el boat (la fiesta de 15 de mi malcriada pequeña primita, que "si no es en un barco, no hago ninguna fiesta") y yo personalmente creo que nos vamos a volar, pero yo me voy a agarrar de algún palo o mástil y seremos banderitas flameando.
Igual aún más que el frío, lo que más me importa es que el barco se oriente. Sí, ya sé que es una pelotudez, pero no me da miedo ahogarme, sino que me preocupa que el barco pierda el rumbo y quede a la deriva. Alguna vez ví una película que me sugestionó de por vida.
A la deriva como mis alumnos de primer año, que como sospechaba, no entienden nada. Los parciales lo han comprobado.
Me indigna que respondan una pregunta grosa para desarrollar en dos renglones. Flaco, si no sabés nada, poné tu nombre en la hoja y andate. Yo lo hice en el CBC. No había estudiado para Semiología y escribí tres hojas. Me saqué un 1.50. Obvio, la recursé, pero en ese mismo instante que ví mi nota pensé "este chabón se tuvo que bancar leer tres páginas para un 1.50. No. No lo hago más". Por su salud mental, y la mía también.
Nunca más me pasó. Las veces que no estudié, no me presenté. Así, directamente. Me pasó de tener que chamuyar alguna que otra pregunta, pero no no saber nada, y tener la caradurez de presentar dos renglones por cada pregunta.
Decime que tienen en el bocho estos pibes. Ah, el verano. Como yo.